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El consumo de marihuana puede tener efectos en tu cuerpo y mente. Si te preocupa el impacto en tu salud mental y rendimiento académico, aquí te presentamos cuatro señales que podrían indicar efectos negativos del consumo: 

1. Baja concentración: Los estudios han demostrado que el consumo de marihuana habitual, sobre todo cuando se vuelve crónico, produce déficits en las funciones cognitivas como: atención y concentración, velocidad de procesamiento data informados, planificación, toma de decisiones, control de respuestas impulsivas, memoria de trabajo, la capacidad para retener información durante un periodo de tiempo breve y también a largo plazo, el aprendizaje asociativo y verbal. 

2. Dependencia y tolerancia: La dependencia es cuando una persona presenta síntomas de abstinencia cuando no consume la droga. Quienes consumen frecuentemente marihuana a menudo reportan irritabilidad, dificultan para dormir, problemas de estado de ánimo, menos apetito, deseos intensos de la droga, inquietad o varias otras formas de molestias físicas que alcanzan un máximo en la primera semana después de dejar el consumo y duran hasta dos semanas. 

 

La dependencia de la marihuana se da cuando el cerebro se adapta a grandes cantidades de la droga y reduce la producción de sus propios neurotransmisores endocannabinoides y la sensibilidad a ellos. 

 

3. Síndrome amotivacional: Pope y Yugerhin – Todd, en su estudio “Los efectos cognitivos residuales del uso intenso de marihuana en estudiantes universitarios" (2017), hacen alusión a que la amortización es una alteración neurofisiológica asociada a la disminución del rendimiento y dificultades en atención, lenguaje y ubicación. 

Además, existen autores quienes afirman que este síndrome es un estado de deterioro "morfofuncional" que se caracteriza por cambies en la sustancia blanca, hipoperfusión en la corteza frontal del cerebro y disminución del funcionalismo del lóbulo frontal, así como la del núcleo de Accumbens y de la amígdala (Castaño Pérez et al., 2021). 

 

4. Ansiedad y depresión: Según un estudio publicado en la revista a “Journal of Affective Disorders”, se encontró que el “consumo de THC se asocia con un mayor riesgo de desarrollar síntomas de ansiedad y depresión en ciertos individuos" (Sewell et al., 2020). Esto se debe a la alteración que el cannabis puede provocar en los circuitos cerebrales relacionados con el estado de ánimo y la regulación emocional. 

 

 

Es importante tener en cuenta que cada persona reacciona de manera diferente al cannabis y que factores como la genética, la cantidad y frecuencia de consumo, así como la predisposición individual, puede influir en los efectos experimentados.